El vidrio reciclado es una de las especialidades en esta nueva tendencia de decoración. Muchas compañías están introduciendo material reciclable en todo el embalaje de sus productos, e incorporan colores orgánicos en sus nuevas producciones.

Existe gran variedad de artículos ecológicos que van desde cuencos para la mesa hasta cubiertos, toallas, sábanas, alfombras de fibras orgánicas, velas vegetales con aromas naturales o marcos para fotos.

César Serrano, uno de los propietarios de la empresa española Ecomanía, señala que este es un sector que cada vez toma mayor auge y que está realmente consolidado en el norte de Europa.

“En nuestro caso, utilizamos todo tipo de materiales: corcho, coco, bambú, elementos biodegradables e inagotables, además de otros fabricados con materiales reciclables que se reconvierten en un artículo muy diferente al inicial, y que tiene un bajo impacto ambiental”, comenta Serrano.

En esa línea, explica que uno de los elementos más originales es la lámpara creada a partir de discos de vinilo. “A primera vista, muy pocos descubren de qué están hechas”, dice. El resultado es realmente atractivo en este tipo de diseños donde, de una forma total o parcial, se reutilizan materiales, ya sea cambiando su fisonomía o el uso que se hace de ellos.

En el apartado textil, el algodón orgánico no deja de sorprender al tacto. La gama de colores no es tan extensa como con las prendas que tienen tintes, pero hay que saber que el algodón también se cultiva de manera natural en distintos colores, no solo en blanco.

Recipientes elaborados con bambú, como cuencos, bandejas o cubiertos, los podemos encontrar en madera de esta planta. “El hilo de caña de bambú no es cien por cien ecológico, pero sí lo es más que los confeccionados con materiales orgánicos”, indica Serrano.

Agua controlada

Para exterior también existen creaciones que no dañan al medioambiente, como las que promueve la empresa Artcromo, que se concentran en una fuente ecológica con forma de cabeza, con circuito de agua cerrado para no desperdiciar ni una gota.

La fuente es una única pieza de fibra de vidrio y resina en color negro. Su material la convierte en una pieza resistente, impermeable y, pese a lo que pueda parecer por sus dimensiones, ligera de peso. Es una buena manera para deleitarse con el discurrir del agua para aislarse de los ruidos cotidianos.

Si lo que se requiere es, además, reducir el consumo de agua dentro de casa, la firma sueca Ikea apuesta por un cambio ecológico, al incorporar en los grifos para el baño aireadores de compensación, unos artilugios que se colocan en la conducción de agua y reducen su consumo en un 50 por ciento.

Fuente | Prensa Libre